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El apoyo para el esquema gubernamental británico de tarjetas de identificación ha caído a su más bajo nivel a la fecha, de acuerdo a la investigación de NO2ID.

La investigación, llevada a cabo por ICM Research, muestra que el 60 por ciento de la población del Reino Unido piensa que las tarjetas de identificación son una "mala idea", mientras que el 38 por ciento piensa que es una buena idea. La base de datos de identidad nacional - que es la base del esquema - es opuesta por una mayoría de dos a uno.

Cuando la misma pregunta fue realizada por NO2ID en 2005, el 55 por ciento pensó que era una buena idea, y el 43 por ciento lo contrario.

Por supuesto que Gordon Brown, el Primer Ministro británico, quisiera haber detenido su caída de aprovación personal a la misma proporción.

De cualquier manera, NO2ID está de nuevo preguntando porqué el gobierno insiste en declarar que la población apoya al plan.

"Los Ministros siempre han indicado que existe apoyo aplastante, pero ocurre justo lo opuesto", dijo el coordinador de NO2ID, Phil Booth. "Mientras más sabe la gente acerca del esquema de identificación, menos les agrada".

La antigua Secretaria del Interior, Jacqui Smith, frecuentemente indicó a los Primeros Ministros que la propia investigación del gobierno mostraba que la población del Reino Unido se alegraría de que el esquema fuera impuesto.

Pero el mes pasado se descubrió que la esperada investigación, que pretendía demostrar que la mayor parte de la nación estaba ansiosa de tener en sus manos sus tarjetas de identificacion, probablemente nunca aparecerá. Vale la pena recordar que la población joven es considerada el arma secreta del esquema, ya que la generación de MySpace es aparentemente indiferente a las amenazas potenciales a la privacidad que implica la tecnología. Tal vez la Oficina del Interior ha descubierto que este no es el caso después de todo.

Solo por mantener la presión, los activistas de NO2ID se reunirán en Manchester esta semana. La ciudad - que apenas se recupera de la Conferencia del Partido Conservador - ha sido utilizada como un sitio de pruebas para el esquema, el cual "intentará buscar voluntarios para unirse con anticipación", de acuerdo a NO2ID. El gobierno ha invertido medio millón de libras esterlinas en una campaña publicitaria para convencer a los comercios que las tarjetas de identificación les beneficiarán al permitirles identificar a sus clientes y empleados.

El gobierno ya ha elegido a trabajadores del aeropuerto de Manchester como usuarios piloto de las credenciales - junto con sus compañeros en el aeropuerto de la ciudad de Londres. Inicialmente, todo el personal a bordo se vería forzado a utilizar las credenciales. Pero después de protestas de pilotos y sindicatos la Oficina del Interior retrocedió repetidamente, primero al indicar que solo los nuevos trabajadores deberían entrar al plan, y luego confirmando que las pruebas serían voluntarias para todos los involucrados.

Por Joe Fay