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Dos hackers holandeses que construyeron una gran botnet fueron sentenciados a prisión esta semana. El principal sospechoso fue sentenciado a dos años de prisión y una multa de 9,000 euros ($11,800 dólares), mientras que su compañero de 28 años fue sentenciado a 18 meses y multado con 4,000 euros ($5,200 dólares). Como ambos ya habían cumplido una condena en la cárcel fueron liberados esta semana.

Los individuos, que forman parte de una comunidad hacker fueron arrestados en el 2005 por extorsionar a una compañía estadounidense, robar identidades para comprar cámaras y consolas de vídeo juegos, y distribuir spyware. La operación produjo un estimado de 60,000 euros en un periodo de seis meses.

El primer sospechoso creó el troyano Toxbot y otro troyano llamado Wayphisher para infectar 2.5 millones de computadoras. Su cómplice fue el responsable de propagar el malware y mantener la red de computadoras comprometidas. Toxbot dio a los hackers el control de las computadoras comprometidas, incluyendo la habilidad para obtener información de lo que se escribe desde el teclado. Los sistemas comprometidos por Wayphisher enviaban a los usuarios a sitios phishing en vez de sitios de actividad bancaria en línea legítimos.

El proveedor de Internet holandés Xs4all fue el primero en darse cuenta de la actividad inusual en su red y alertó a las autoridades.

El FBI cree que el hombre lanzó un ataque de negación de servicio contra la red adware Zango en represalia por la negativa de la compañía para pagar honorarios. Zango inició una queja legal, pero ha retirado los cargos.

Los otros cuatro miembros de la banda (incluyendo al tercer hombre arrestado en 2005) enfrentan menos cargos, irán a juicio después de este año.

En el 2005, los jueces holandeses alegaron que la banda trabajo para la mafia rusa, sin embargo esto nunca fue comprobado.