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Una nueva encuesta de seguridad muestra que más de la mitad de los negocios de Nueva Zelanda han sufrido intentos de phishing.

El Phishing, es un intento de solicitar información confidencial de un individuo, de un grupo o de una organización por parte de terceras personas. Estos intentos la mayoría de las veces son llevados a cabo por medio de páginas Web usando ingeniería social en donde la información obtenida es usada para fines fraudulentos.

Frecuentemente, el phishing involucra engañar a un usuario haciéndole creer que llega a un destino seguro, una página Web de un banco por ejemplo, cuando sólo es una "maqueta" diseñada para simular la verdadera página Web mientras el usuario deposita su información personal.