A nivel mundial, 47% de los consumidores optarían por cambiar a su operador de telefonía móvil en caso de que se presente una falla de seguridad, un 7% más desde el año pasado, pero sólo 29% por ciento de los estadounidenses haría lo mismo, de acuerdo con una encuesta de Nokia a más de 20 mil clientes.

México ocupó el lugar más alto con un 73%.

La razón de esta diferencia es que los consumidores tienen diferentes actitudes hacia la relación entre ellos, sus teléfonos y sus operadores.

"En algunos mercados, la gente piensa que son dueños del dispositivo, y el operador es sólo la conexión", dijo Giuseppe Targia, vicepresidente de la unidad de seguridad e Internet de las cosas en Grupo Nokia.

Esto es similar a la forma en que los clientes en algunos países piensan de su proveedor de servicios de Internet, agregó. Pocas personas podrían culpar a su compañía de Internet si su equipo tiene un virus.

En otros mercados, sin embargo, el teléfono móvil es una extensión de su servicio telefónico. Además, algunos mercados de telefonía móvil son más peligrosos que otras.

"La cantidad de malware que detectamos en el espacio móvil en los mercados de transición y los mercados emergentes, es mayor que en los mercados maduros", dijo Targia.

Además, los clientes tienden a usar las tiendas de aplicaciones no oficiales en los mercados emergentes, que son más propensas a tener aplicaciones maliciosas. "En un país rico, la motivación para no usar la tienda de aplicaciones legal es más baja", dijo.

En general, 91% de los consumidores a nivel mundial están preocupados por lo menos de un problema de seguridad. Sin embargo, eso no quiere decir que toman decisiones de compra basadas en la seguridad. De una lista de razones para la elección de su operador de telefonía móvil, la seguridad ocupa el último lugar, con sólo 9% de los consumidores que lo seleccionaron como motivo principal.