El pasado martes Canadá acusó a hackers chinos de atacar una red de computadoras clave y presentó una protesta ante Beijing, elevando las tensiones en un momento en que Ottawa quiere impulsar las ventas de petróleo a China.

Las autoridades dijeron que "un acto altamente sofisticado patrocinado por el Estado chino" había estallado recientemente en el Consejo Nacional de Investigación. El Consejo, órgano de investigación más importante del gobierno, trabaja con empresas como el fabricante de aviones y trenes Bombardier Inc.

Canadá había informado de incidentes de intrusiones anteriormente, pero esta es la primera vez que ha señalado a China.

China es citado a menudo como sospechoso en varios ataques en oficinas de Estados Unidos y otras naciones. Beijing rechaza sistemáticamente tales acusaciones.

El ministro de Relaciones Exteriores, John Baird tuvo "un intercambio total y franco de opiniones" sobre el caso con el ministro de relaciones exteriores de China, Wang Yi, durante una reunión en Beijing el martes, dijo un oficial. "El gobierno lo está tomando muy en serio, estamos tratando el asunto desde los más altos niveles, tanto en Beijing como en Ottawa", dijo el portavoz de Baird, Adam Hodge.

Corinne Charette, director de información del gobierno de Canadá, dijo que aunque las computadoras de la NRC no operaban dentro del sistema de gobierno global, habían sido aisladas como medida de precaución. "No tenemos ninguna evidencia de que la intrusión de datos se haya producido en lo amplio de la red de Canadá", dijo en un comunicado.

Por separado, el NRC dijo que estaba trabajando para establecer una nueva red segura, lo que podría tardar hasta un año en construir.

La tendencia derechista del gobierno conservador de Canadá ha tenido una relación irregular con Beijing desde que asumió el poder en 2006. Citando preocupaciones sobre los derechos humanos, el primer ministro Stephen Harper inicialmente mantuvo su distancia de China. Bajo la presión de los negocios en Canadá, él se acercó poco a poco a Beijing.

Harper hizo una visita oficial de alto nivel a principios de 2012 y se comprometió a hacer todo lo posible para aumentar las exportaciones de petróleo, citando la necesidad de encontrar nuevos mercados. Actualmente, Estados Unidos compra prácticamente todo el crudo de Canadá.

El ataque contra el sistema NRC no fue la primera amenaza hacia Canadá que está relacionada con China. En septiembre de 2012, Canadá dijo que era consciente de que los criminales cibernéticos habían violado la seguridad en un fabricante nacional de software utilizado por las grandes empresas energéticas.

El último informe anual de la agencia de espionaje del Servicio de Inteligencia Canadiense dedica una sección a la seguridad cibernética pero no menciona a China. Tampoco lo hace la estrategia de seguridad cibernética oficial de Canadá.

Otras naciones han sido menos tímidas. El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha acusado a un hombre de negocios chino de la intrusión en los sistemas informáticos de Boeing y otras compañías, con el fin de obtener datos sobre los proyectos militares.

Este mes, el New York Times informó que los atacantes chinos irrumpieron en las redes informáticas de la agencia gubernamental de Estados Unidos que mantiene la información personal de todos los empleados federales en marzo pasado.