Los cajeros automáticos no parecen muy  actuales cuando se comparan con teléfonos inteligentes de última generación, esto podría deberse a que aún utilizan Windows XP, sistema operativo que dejará de recibir soporte por parte de Microsoft a partir del mes de abril.

La principal razón de esta falta de actualización, según datos en los Estados Unidos, es que existen alrededor de 400 mil equipos que son administrados por pequeñas compañías dedicadas a la venta de equipos a negocios pequeños o a grandes empresas. Incluso algunos de los cajeros automáticos en los principales bancos de ese país son demasiado obsoletos: 3mil máquinas del banco JPMorgan’s son demasiado viejas para actualizarse a Windows XP.

Microsoft está vendiendo paquetes de soporte extendido para Windows XP, algunos operadores han accedido a comprar estos paquetes y garantizar actualizaciones por más tiempo, sin embargo, los operadores que no tomen la medidas adecuadas tendrán máquinas funcionales pero vulnerables a malware o intrusiones.  

El fabricante de los equipos Diebold declaró en el sitio Businessweek que, aun cuando el software de los cajeros automáticos está desactualizado, los estados de cuenta de los usuarios están protegidos con mecanismos antifraudes.