Cibercriminales encontraron en América Latina y el Caribe la zona idónea para realizar negocios que generen grandes ganancias, aprovechando que los niveles de protección de la información y de concientización aún son pobres en esta zona.

Trend Micro elaboró un análisis poco común, pero muy oportuno e interesante, para conocer la situación actual en esta región. Después de recabar datos de la mayoría de países pertenecientes a la Organización de los Estados Americanos (OEA) y sus respectivas honeypots, Trend Micro concluyó que la ciberdelincuencia va en aumento, lo cual no es una sorpresa, ya que dicho incremento actualmente es un fenómeno global, sin embargo, menciona que las empresas con negocios en dichos países deben estar alertas ante la oleada de ataques que se han presentado recientemente.

En general, los ataques a países de la OEA aumentaron entre un 8 y 40 por ciento en todas las categorías de amenaza durante el período 2011-2012, donde destacan hacktivismo y ataques a banca en línea.

En cuestión de seguridad informática, el mayor problema al que se enfrenta la región es el malware, sin tomar en cuenta que abundan los sistemas de cómputo desactualizados, por lo que dichos equipos son vulnerables ante múltiples vectores de ataque. Esto solo es un indicativo de la complacencia por parte del cliente y su poco entendimiento respecto a los riesgos que implica utilizar software vulnerable.

Además, el crimen organizado de cada país adaptó sus métodos de ataque exitosamente, aprovechando las debilidades particulares de cada nación, incluso estos criminales desarrollaron sus propios kits, siendo Pice Bot el más representativo de ellos, dicho malware se enfocaba en robar datos bancarios, lo que demuestra un gran avance en las técnicas empleadas para realizar los ataques, ya que ahora se opta por software malicioso propio, enfocado en atacar a cierto objetivo, en este caso, la población de América latina.

Los sistemas de control industrial también se vieron afectados, según Trend Micro, se registraron 39 ataques contra infraestructura en solo un mes, 12 de los cuales fueron clasificados como automatizados.

El estudio muestra que la respuesta por parte de los gobiernos es desigual, ya que el dinero, la experiencia y la falta de una conciencia de seguridad son los factores que afectan el crecimiento de un país en materia de seguridad. A pesar de lo anterior resulta gratificante ver que poco a poco se intenta establecer una conciencia de ciberdefensa a nivel global.