Brechas de seguridad como la que expuso datos de tarjetas de crédito de los clientes del supermercado Schnucks por cuatro meses, podrían volverse más comunes.

Durante algunos meses, al inicio de este año, los datos personales de los clientes de la cadena de supermercados Schnucks fueron expuestos a hackers, cuyo trabajo fue indetectable hasta que una compañía de procesamiento de tarjetas emitió una alerta sobre actividad fraudulenta en un grupo de tarjetas de crédito y débito utilizadas en las tiendas.

Aún después de que se emitió la alerta, tomó tiempo determinar la causa y el cierre del incidente. En una investigación inicial, Schnucks descartó rápidamente como causa del incidente el robo interno de información o fallas en las estaciones de venta. El comerciante de St. Louis contrató a la firma de seguridad Mandiat para seguir con la investigación, pero los especialistas de la firma necesitaron cerca de dos semanas para encontrar y cerrar la brecha y después asegurar los sistemas de la compañía.

Los analistas afirman que los retrasos en la búsqueda y cierre de las brechas podrían volverse más comunes, debido a que los hackers utilizan herramientas cada vez más sofisticadas y las herramientas necesarias para detenerlos, en su mayoría, están en desarrollo.